Sinopsis

En este thriller, un asesino anda suelto por las principales calles de Nueva York matando sin ningún tipo de patrón ni perfil de víctima. Un profesor experto en Criminología colabora en las investigaciones con una inspectora de policía de homicidios de la Gran Manzana. Una persecución a vida o muerte entre taxis para descubrir cuanto antes al criminal porque nadie sabe quién será su próxima víctima.

Idea original

Gon y Rafa Oliver

El mal, como tema recurrente en la ficción en todas sus vertientes, ha llenado cientos de páginas y ha sido tema principal de películas y series en todo el mundo.

Los personajes míticos, históricos y legendarios que nos han acompañado a lo largo de los tiempos en nuestras peores pesasdillas han arrastrado cierto halo de magnetismo, atracción y casi dependencia de su aire siniestro y perverso. El lado oscuro.

Personajes como Caín, Judas, Calígula, Hitler, Frankestein, Drácula, Tiburón, Hannibal Lecter y un sin fin de asesinos crueles, sin piedad, siempre han estado de moda y han sido protagonistas de multitud de versiones donde el suspense y el miedo han tenido al espectador en vilo hasta que se encendían las luces de la sala y se daban cuenta que solo era eso, ficción. 

Pero, ¿qué pasa con el mal, el mal en sí, el mal de verdad? Qué ocurre si alguien, aparentemente normal, en un momento de tensión, opta por hacer algo malo, por hacer daño, por inflingir dolor y sufrimiento. 

¿Es algo innato en el ser humano? ¿No existe el bien sin el mal, la luz sin la oscuridad?

Con el mal se nace o nos hacemos malos por los acontecimientos, el entorno, algo que nos ocurrió y nos marcó para siempre. Y si todos fuéramos malos, naciéramos con ese gen, y en algunos estuviera más presente que en otros. Cuando pensamos en esta clase de individuos, generalmente no miramos a nuestro alrededor. 

Como dijo Edmund Burke, «para que triunfe el mal, solo es necesario que los buenos no hagan nada».